martes, 18 de febrero de 2014

Cerro Fuerte de Guájar Alto. 31 de enero de 2014

Comentarios: Antonio Arana.
Fotografías: Antonio y Juanlu.

El 15 de noviembre de 2008 tuvimos el primer contacto con la sierra de los Guájares, al noroeste de Motril. Ascendimos al Cerro de la Giralda, de 1.431 metros de altitud y, posteriormente, subimos al poblado medieval del Castillejo, en Guájar-Faragüit. Aquel día me llamó mucho la atención un cerro con forma de peñón, aislado y prácticamente inexpugnable: el Cerro del Fuerte de Guájar Alto. Y me prometí que algún dia intentaría coronar la cumbre.

Y ese día es hoy, seis años después.

Como siempre, me hice con los mapas topográficos de la zona a escala 1:25.000 y los estudié a conciencia, como hago con cualquier ruta que no conozco.


 Mapa Topográfico Nacional de España, escala 1:25.000.


A unos 750 metros pasado el pueblo de Guájar Alto, cuya altitud es de 470 metros, hay una bifurcación. La pista de  la derecha nos lleva, tras un sin fin de curvas, al Cerro de la Giralda. Pero hoy tomamos la de la izquierda que se introduce en el Barranco del Fuerte hasta llegar a una plataforma artificial, junto a una construcción, donde dejamos el coche (650 metros de altitud).



Comenzamos a andar siguiendo el arroyo hasta llegar a un azud. A partir de aquí habría que meterse en el agua necesariamente para continuar por el cauce que se encajona más adelante. ¡Pero estamos en enero y hace frío! por lo que decidimos ascender hacia el noroeste, sin una vereda definida, buscando una especie de cortafuegos que se dirige hacia la cumbre.


Primer contacto con el agua.


Azud en el Barranco del Fuerte.

La gran mole del Fuerte se aprecia al noroeste, rodeada de un frondoso pinar.



Cerro del Fuerte.

Tras un rato de "lucha" por el matorral, llegamos al árido y rocoso cortafuegos, iniciando su ascenso muy pendiente.


Parte final del cortafuegos, cerca de la base del pico.

Vamos pensando, mientras subimos, en el cuidado que deberemos tener cuando iniciemos el descenso por la intensa pendiente del cortafuegos y el terreno excesivamente resbaladizo por un continuo y menudo derrubio de piedras. Pero ¡eso vendrá después! Ahora fijamos la vista en la mole que tenemos delante, intentando descubrir una subida aceptable por esta parte. Pero no lo vemos claro y decidimos bordear el cerro por el oeste por si descubrimos una opción válida para el ascenso.


Por la parte oeste.

Pero no encontramos ninguna opción de subida porque esta parte del cerro está constituida por un cortado continuo sin posibilidades de ascenso.

Con cierta dificultad conseguimos llegar a la parte noroccidental del peñón donde vemos la única posibilidad para llegar a la cumbre, no sin correr algún pequeño riesgo.


 Acercándonos a la única "entrada" posible hacia la cumbre.

La cumbre del Cerro del Fuerte es una meseta plana en la que abunda el matorral mediterráneo (jara, romero y aulaga), en cuya parte central hay una sima cuya profundidad desconozco pero que sería interesante explorar.
 

 Cumbre del Fuerte (altitud 1.044 metros).


Boca de la sima.


Junto a la sima.

Desde la cumbre podemos apreciar, al noreste, el Cerro de la Giralda.


Cerro de la Giralda, al fondo, entre nubes.


 Panorámica desde la cumbre.



El Cerro de la Giralda con su característica forma piramidal, al fondo.

 Regresamos por el mismo camino buscando el cortafuegos.


Descendiendo por la parte alta del cortafuegos.


 Por el cortafuegos.


Precioso mirador rocoso en mitad del cortafuegos.


 Cara este del Cerro del Fuerte y Cerro de la Jesa, a la derecha. La perspectiva engaña pues este último cerro tiene 1.048 metros, cuatro metros más que el Fuerte.


 Imagen de Google Earth del Cerro del Fuerte.


Hemos empleado 5 horas en la realización de la ruta completa, empleando la mitad del tiempo en el ascenso y, la otra mitad, en el descenso.

El tiempo empleado en coche desde Vélez-Málaga a Guájar Alto es de una hora y media (sólo ida).

domingo, 9 de febrero de 2014

Fuerte de Frigiliana y Cerro de los Monederos. 26 de enero de 2014

Comentarios:   Antonio Arana
Fotografías:   Antonio, Ana y Francis

Ruta histórica la de hoy puesto que el casi inexpugnable peñón del Fuerte de Frigiliana se convirtió hace cuatro siglos en el último refugio de los moriscos en las tierras de la Axarquía cuando se vieron en la necesidad de rebelarse contra la Inquisición y la Corona, al serles prohibido su habla, su forma de vestir, los baños, la música, sus cantares, sus fiestas y sus bodas. Y otras múltiples causas como la asfixiante presión fiscal, la expoliación de las tierras y la crisis comercial de la seda, contribuyeron, igualmente, a la rebelión.

Abandonaron sus hogares, despoblando las alquerías y los campos y pusieron rumbo a Frigiliana, instalándose en la cordillera del Fuerte, donde fueron atacados por los cristianos.

El Comendador Mayor de Castilla, don Luis de Zúñiga y Requesens,  recibe órdenes en Italia del monarca Felipe II para trasladar su flota y marinería al reino de Granada y ponerla a disposición de don Juan de Austria para combatir la rebelión. 

El sábado 11 de mayo de 1569 intervinieron en el asalto cristiano, además de los tercios de Flandes, un contingente de presidiarios de un penal de Barcelona a los cuales se les concedió  el perdón por este hecho y, también, 300 remeros de las galeras, turcos en su mayoría.

Los cristianos tuvieron en la batalla 400 muertos y 800 heridos mientras que dentro del Fuerte murieron casi dos mil moriscos: quinientos hombres y casi mil trescientas mujeres y niños. Y se tomaron como esclavos muchas moras y muchachos.

Ese día quedó enterrada, en definitiva, la vida musulmana como pueblo en la tierra malagueña de Benthomiz.


Y, una vez, puestos en antecedentes sobre la importancia histórica de la montaña que vamos a subir hoy, comienzo la narración de la ruta para no ponerme muy pesado. A la vuelta, hemos decidido ascender, además, el Cerro de los Monederos, situado al norte del Fuerte.

El peñón del Fuerte de Frigiliana ronda los 1.000 metros de altitud. Tiene un vértice geodésico que se alza exactamente a los 976 metros. La subida más cómoda se realiza desde el Pozo Lízar, a un km a las afueras del pueblo. Junto a esa alberca sale una vereda inicialmente escalonada en la roca que conduce sin ningún error posible a la cumbre del pico. Esta ruta es la oficial, ascendiendo desde el sureste por las Lomas del Pedregal. Pero nosotros vamos a ascender directamente por la parte norte donde encontraremos una vereda casi perdida que enlazará con la descrita antes muy cerca ya de la cumbre.

En la carretera de Frigiliana a Torrox, a dos km desde el primer pueblo, sale una pista asfaltada tras un gran invernadero situado al pie de la carretera, a la derecha, y que se dirige hacia la aldea del Acebuchal. Al llegar cerca de dicha aldea hay un cruce que nos llevará a ella si lo cogemos a la izquierda. Nosotros seguimos la pista de la derecha, ya sin asfalto, durante unos kilómetros, dejando atrás una cantera y llegando a un recodo en el camino donde dejaremos los coches, pudiendo contemplar a la derecha una ancha vereda, más bien un resto de carril abandonado que a modo de blanca herida  hiende el monte dirigiéndose a un collado entre el Cerro de los Monederos y el Cerro del Fuerte que queda a la derecha. 

Comenzamos a andar desde los 640 metros de altitud.Hay que salvar un desnivel de unos 350 metros. ¿pocos metros, no...? Pues creedme si os digo que ¡hay que currárselos!


 Los primeros metros hacia el collado. Al fondo, la loma del Cerro de los Monederos.

Acusando el esfuerzo de la subida llegamos al collado pudiendo ver a la derecha el altivo pico del Fuerte.


El Fuerte de Frigiliana desde el collado situado al norte.

Seguimos una vereda que nos va llevando hacia la base de la montaña, encontrando, al inicio de la misma, junto a una calera, restos de mangueras utilizadas hace años para apagar el incendio que tuvo lugar en esta zona. ¿No hay nadie responsable de retirar todos esos restos que no ayudan nada al mantenimiento del paisaje?

Bordeamos algunas grandes peñas junto a la vereda. Francisco, nuestro alevín de 6 años, se empeña en subir a una de ellas y, el siempre solidario Javi, lo acompaña.


Javi y Francisco.

Pronto llegamos a la loma norte del pico pasando junto a algunas torrenteras, entre troncos de pinos secos caídos y un espeso manto de aulagas.




 Y, como no podía ser de otra manera, Francisco que cree que "todo el monte es orégano", se empeña en subir directamente por el mar de aulagas dejando la vereda que lo bordea. Y, en lugar de hacerlo desistir de su empeño, Javi, acompañado, además, de Alejandro y de Juanlu, le siguen el juego, escindiéndose el grupo en dos: los "sensatos" que seguimos la vereda y los "aulagueros" como los llamaremos más tarde.


Juanlu con el Lucero y el Cisne a su espalda.


Inma y la cola de Ronnie asomando entre las rocas.


Esta es la ruta "fácil" seguida por el grupo de los "sensatos". Imaginaos por dónde van los "aulagueros..."

Un rato después nos reagrupamos todos y los "aulagueros" nos cuentan su batallita hechos verdaderos Cristos por los pinchazos y arañazos, sobre todo Alejandro que cayó de plano sobre una aulaga. 


Encuentro con los "aulagueros", cerca ya de la cumbre.

Seguimos ahora la vereda bien marcada que nos llevará hasta el vértice geodésico. Hemos hecho la subida en una hora y media.


Cumbre del Fuerte de Frigiliana. Francisco abrazado el vértice geodésico.


Con Ana. La Maroma, aún nevada, a lo lejos.


Vivac en la cumbre.


Con Juanlu "Ricitos".

 
 La Almijara más oriental desde el Fuerte.

 
Panorámica de las Sierras Tejeda y Almijara desde la cumbre del Fuerte de Frigiliana.

Tras un rato de esparcimiento  haciendo fotos, tomando algo y admirando el paisaje, decidimos realizar el descenso para dirigirnos al Cerro de los Monederos.


Descendiendo por la cara norte.

Una vez en el collado entre los dos picos, a 798 ms de altitud, iniciamos la subida de los 125 metros de desnivel que nos separan de la cumbre del Cerro de los Monederos que tiene 923 metros.
 

 Ascendiendo al Cerro de los Monederos.


El Fuerte de Frigiliana desde la cumbre del Cerro de los Monederos. Las Lomas del Pedregal, a la izquierda.


Cumbre del Cerro de los Monederos. El Lucero y el Lucerillo, al fondo.


Ana y Miguel.


Ruinas de la Ermita de Calixto en el Cerro de los Monederos. A la derecha, el Cerro Cisne.


Ermita de Calixto.

Bordeamos el Cerro de los Monederos por la parte oriental, entre un bosquete de jara pringosa (Cistus ladanifer) para regresar al collado y, de ahí, descender hasta los coches.

 

Hacia el collado. La gran mole del Cisne, al frente.


 Cerro Verde de Torrox desde el collado. A lo lejos, el peñón de la Atalaya y Cerro Verde de Cómpeta, a su derecha.


Panorámica del Fuerte de Frigiliana desde el Cerro de los Monederos.


 Podéis consultar el Mapa Topográfico Nacional de España, 1.054 II (Torrox) para planificar esta ruta.