Comentarios: Antonio Arana.
Fotografías: Antonio Arana.
Hoy necesitamos quemar un poco de adrenalina y hemos decidido hacer escalada en un lugar mágico como es la Peña de Hierro, flanqueada por los pueblos de Riogordo y Comares, al oeste, y por Romanes y el Embalse de la Viñuela, al este. Es una especie de mamila rocosa que destaca en el paisaje.
Juanlu, Lute y Javi se encargan de la instalación de las diversas vías de escalada existentes en la parte sureste de la peña.
El ascenso es de, aproximadamente, 18 metros, realizando después la bajada en ráppel.
Subimos por las diversas vías. Los más jóvenes se van rápidamente a la más difícil (6a). Los más maduritos y pesados nos vamos a la 4+ y 5+.
Inma, Bea, Paloma y Yoli nos dan un verdadero baño de humildad a la mayoría de los "machotes".
Nos ayudamos unos a otros asegurando al que inicia el ascenso. La roca tiene múltiples grietas a las que agarrarse. Utilizamos los pies de gato y recurrimos al magnesio... Todo parece muy fácil visto desde abajo. Pero cuando nos toca el turno, desaparecen todas las facilidades... Y la boca se nos queda completamente seca.
Javi está hecho un león a sus 15 años. Si lo viera su madre...
Hasta Pepe hace sus pinitos en la vía 4+.
Y Jose, el cachorrillo del grupo, sonríe triunfante cuando consigue su meta.
Dos parejas de cernícalos sobrevuelan constantemente la zona.
Pasamos una mañana muy agradable aunque acabamos con agujetas en los antebrazos.
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